Qué desventajas puede experimentar el filamento PLA en contacto con alcohol

El filamento PLA (ácido poliláctico) se ha convertido en uno de los materiales más populares en la impresión 3D, especialmente para principiantes, debido a su facilidad de uso y biodegradabilidad. Sin embargo, es crucial entender sus limitaciones y cómo interactúa con diferentes sustancias, siendo el alcohol una de las más problemáticas. Este artículo explorará en detalle las desventajas que pueden surgir al exponer el PLA al alcohol, proporcionando información valiosa para optimizar tus proyectos de impresión.
El PLA, derivado de recursos renovables como el almidón de maíz o la caña de azúcar, ofrece una alternativa más ecológica a los plásticos tradicionales. Su baja temperatura de impresión y la mínima emisión de olores lo hacen ideal para entornos domésticos, pero su susceptibilidad a ciertos disolventes, como el alcohol, requiere una consideración cuidadosa. Descubriremos cómo el tipo de alcohol, la duración de la exposición y el tratamiento superficial del PLA influyen en el resultado final.
Alteración de las Propiedades Mecánicas
El contacto con alcohol, incluso en bajas concentraciones, puede provocar una degradación significativa de las propiedades mecánicas del PLA. La estructura polimérica del PLA es susceptible a la hinchazón y, eventualmente, a la disolución por ciertos tipos de alcohol. Esto se traduce en una pérdida de resistencia a la tracción, un aumento de la fragilidad y una menor capacidad para soportar cargas.
La magnitud de este efecto depende del tipo de alcohol utilizado. Los alcoholes de cadena más corta, como el isopropílico o el etílico, son más agresivos que los alcoholes de cadena más larga. La exposición prolongada, incluso a bajas concentraciones, puede resultar en un debilitamiento considerable, haciendo que las piezas impresas sean propensas a la rotura.
Para mitigar este problema, es fundamental evitar el contacto prolongado con alcohol y considerar el uso de recubrimientos protectores. La aplicación de una capa de barniz o epoxi puede servir como una barrera, aunque esto añade un paso adicional al proceso y altera la naturaleza biodegradable del material.
Pérdida de Precisión Dimensional
La exposición al alcohol puede causar la deformación de las piezas impresas en PLA, lo que conlleva una pérdida de precisión dimensional. El alcohol se infiltra en la estructura del polímero, provocando su expansión y posterior contracción al evaporarse el líquido. Este ciclo de hinchazón y contracción genera tensiones internas que distorsionan la forma original de la pieza.
La gravedad de la deformación depende del volumen de la pieza, el grosor de las paredes y la duración de la exposición al alcohol. Las piezas delgadas y con paredes finas son más susceptibles a la deformación que las piezas más robustas. La pérdida de precisión dimensional puede ser un problema crítico para aplicaciones que requieren tolerancias ajustadas.
El uso de técnicas de post-procesado, como el recocido, puede ayudar a estabilizar la estructura del PLA y reducir la deformación, pero esto requiere un control preciso de la temperatura y el tiempo para evitar alterar otras propiedades del polímero.
Acabado Superficial Deteriorado
El alcohol puede afectar negativamente el acabado superficial de las piezas impresas en PLA, haciéndolas más ásperas y opacas. La exposición al alcohol puede disolver las capas superficiales del PLA, revelando una textura irregular y una menor reflectividad. Esto es especialmente visible en piezas que se han pulido o tratado para obtener un acabado brillante.
En algunos casos, el alcohol puede dejar manchas o marcas en la superficie, especialmente si la pieza no está completamente seca antes de ser manipulada. Estas manchas pueden ser difíciles de eliminar y afectar la apariencia estética de la pieza. La porosidad superficial también puede aumentar, facilitando la adherencia de suciedad y bacterias.
La aplicación de un sellador o barniz transparente después de la impresión puede ayudar a proteger la superficie del PLA y mejorar su resistencia al alcohol, pero es importante elegir un producto compatible con el material.
Problemas de Adherencia en Post-Procesado

Si se utiliza alcohol para preparar superficies de PLA para el post-procesado, como la pintura o el lijado, puede surgir un problema de adherencia. El alcohol puede dejar residuos en la superficie que interfieren con la capacidad de otros materiales para adherirse correctamente. Esto puede resultar en un desprendimiento prematuro de la pintura o un acabado desigual.
Además, el alcohol puede ablandar la superficie del PLA, haciéndola más susceptible al rayado o la abrasión durante el lijado. Es crucial asegurarse de que la superficie esté completamente seca y limpia antes de aplicar cualquier tratamiento adicional. La limpieza con agua y jabón suave puede ser una alternativa más segura.
Utilizar imprimaciones específicas para PLA que promuevan la adherencia puede ayudar a solucionar este problema, pero es esencial seguir las instrucciones del fabricante al pie de la letra.
Alteración de la Capacidad de Pintura
El contacto previo con alcohol puede dificultar la correcta aplicación de la pintura sobre las piezas de PLA. La superficie puede volverse menos receptiva a la pintura, resultando en una cobertura desigual, burbujas o descascarillamiento. Incluso pinturas diseñadas para plásticos pueden tener problemas para adherirse a una superficie previamente expuesta al alcohol.
La pintura puede requerir tiempos de secado más largos o múltiples capas para lograr una cobertura adecuada, aumentando el tiempo y el costo del proceso de post-procesado. El alcohol puede alterar la tensión superficial del PLA, afectando la manera en que la pintura se extiende y se fija.
Se recomienda, en caso de querer pintar piezas de PLA, realizar una prueba en un área discreta para verificar la adherencia de la pintura después de la exposición al alcohol. Utilizar una imprimación específica para PLA y seguir las indicaciones del fabricante de la pintura.
Conclusión
La exposición al alcohol puede generar una serie de problemas en las piezas impresas con filamento PLA, desde la alteración de sus propiedades mecánicas y dimensionales hasta el deterioro de su acabado superficial y la dificultad para realizar post-procesado efectivo. Es crucial ser consciente de estas desventajas y tomar precauciones para evitar el contacto innecesario con alcohol.
La elección de materiales alternativos, como el ABS o el PETG, puede ser una opción más adecuada para aplicaciones que requieren resistencia a los disolventes. Si el PLA es la única opción viable, la aplicación de recubrimientos protectores, el control preciso del proceso de impresión y el uso de técnicas de post-procesado apropiadas pueden ayudar a mitigar los efectos negativos del alcohol y garantizar la durabilidad de tus creaciones.
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